Entonces, el momento es ahora.
Estamos entrando en una nueva era de horsemanship, liderazgo compasivo y desarrollo personal. Esto está madurando en el colectivo; la gente está lista, dispuesta y emocionada ante la posibilidad de un crecimiento emocional y espiritual.
Si estás leyendo esto, ya conoces la profundidad y la sabiduría inmensa de los caballos, el espacio que sostienen para facilitar sanación profunda y reflexión personal. Sanar con caballos no es una moda pasajera, es un movimiento.
Ya sabes la transformación que puede ocurrir simplemente al mirar a los ojos de un caballo, lo que es posible si alguien se permite estar completamente presente. Entonces, ¿por qué no aprender a facilitar y empoderar a otros para que experimenten una autorreflexión radical y una transformación profunda?
Si sabes en lo más profundo de tu alma que estás destinado a caminar junto a los caballos, empoderando a otros a mirar dentro de sí mismos,
entonces este camino es para ti.